sábado, julio 15, 2006

A Case Against The Summer

Insólito viaje a Boadilla del Monte el viernes por a noche con Gabriela solo para comprobar que estoy viejo. Definitivamente no me interesan más los festivales de música, ni aunque sea el Summercase y tenga uno de los carteles más rutilantes de la temporada madrileña, seca y caliente como un horno de microondas. Cuatro escenarios con música en simultáneo serán mucho escenario y muy simultáneos, pero no música.

Encontrar el camino, el parking, la caminata, la cola que tarda justo lo que dura la actuación de The Divine Comedy, una de los dos nombres que me habían decidido a ir. Suerte que sí vimos a Rufus Wainwright. El show fue corto pero intenso, y pese al ruido que venía de los escenarios circundantes, bastó para demostrar que aún sin banda Rufus tiene una voz increíble, un repertorio demoledor y una gran presencia escénica. También sirvió para que conociéramos a Lucy Wainwright, una de sus tres hermanas, quien puso coros a varios temas. Los Wainwright McGarrigle parecen una dinastía musical inagotable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pero contá algo más ...

Unknown dijo...

Cinco meses más tarde, cuento algo más. El show de Rufus fue breve, menos de una hora. Llegamos temprano y pudimos ubicarnos muy cerca del escenario. Rufus tuvo suerte de que la parte media del show calzó justo con el descanso entre Dandy Warhols y New Order en el escenario de atrás, por lo cual pudo tocar más o menos la mayor parte del show sin ruidos de fondo. Dado que no tuvo más acompañamiento que el de su hermana, tomó la sabia decisión de centrarse en el repertorio de sus dos primeros discos, Rufus Wainwright y Poses, menos orquestales y por lo tanto más fáciles de reproducir en directo a puro piano y voz: Beauty Mark, Cigarettes and Chocolate Milk, etc.